Con el avance tecnológico, la ciencia ha descubierto que todo lo que existe e incluso lo que no podemos percibir, es una forma en que la energía se expresa y la comunidad científica ha aprendido a manipularla haciéndola presente en nuestra cotidianidad con toda clase de aparatos que transforman la energía en sonido, imágenes, videos y toda suerte de servicios que incluso con un reloj de pulsera pueden saber tu estado de salud.
Los antiguos sabio chinos ya sabían esto. Anteriores a la acupuntura, el Tui Na y el Tao Jin con más 2000 años de antigüedad son dos ramas de la medicina china que buscan restablecer el equilibrio energético del cuerpo, haciendo que la energía vital de tu ser fluya en la cantidades adecuadas y en los ritmos correctos logrando que todas tus funciones biológicas recobren su estado natural.
Esto se logra con presiones, empujes, agarres y armonización energética de diferentes puntos vitales en el cuerpo que funcionan como interruptores que lideran el paso de la energía.
Estás a una caricia de alcanzar tu bienestar.
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